Capítulo IX

Una vez saciada mi sed y lavado mi cara, me dirigí hacia lo árboles.No sabía cuanto tiempo llevaba caminando cuando paré.Solo aquellos que vivieran en el bosque (o yo misma) se hubieran dado cuenta de la actividad que había a mi alrededor.A unos 500 m, un oso negro estaba empujando un árbol, un ratón se intentaba esconder entre la hierba (Sin mucho éxito, ya veréis porque) pero una lechuza lo atrapó, pero lo que me interesaba era una loba gris de ojos ambarinos.Me observaba y yo a ella (Empate).Bingo:Ya tengo un sitio para esconderme(Sí, querido lector, puedo apoderarme de cuerpos tanto vivos como muertos,  pasando por los inertes, por cuerpos animales como por vegetales, también minerales, aunque no tiene mucha gracia ser un roble con un leñador cerca) mi cuerpo se separó célula por célula y pasó a formar parte del entorno y mi espíritu se metió en el cuerpo de la loba(Por supuesto, esto es mucho más complicado pero no me apetece contaros todo el proceso, básicamente porque os aburriría).Al principio, noté cierta resistencia a que me introdujera en su cuerpo, pero al final comprendió que era mejor rendirse y compartir su cuerpo, pero de repente, un torrente de imágenes me llegaron:Unos cachorros de lobo, una cueva y un ciervo y lo comprendí, la loba había salido a cazar para alimentar a sus cachorros y, que también yo le había estropeado la caza pero decidí repara mi error:Gracias a mí, ahora éramos más rápidas y teníamos más resistencia. Olisqueamos el aire en busca del olor del ciervo, en cuanto lo encontramos corrimos en su dirección.

Capítulo VIII

No sabía hacia adonde dirigirme, pero cuando vi aquel bosque que se extendía por hectáreas y hectáreas de terreno, supe que aquel era el sitio ideal para esconderme.

Aterricé en un pequeño claro del bosque, justo al lado de un pequeño riachuelo.Mis alas desaparecieron, me asome a riachuelo para coger un poco de para agua beber y lavarme la cara, en el proceso, miré mi reflejo y  dediqué un rato especial a mis ojos.Mis extraños ojos.Mis ojos antes verdes, ahora no tienen un color definido igual que mi pelo, los primeros, a causa de una operación ahora cambian de color(En estos momentos, pasaban del naranja al rojo) y mi pelo, que a simple vista parecía negro, era azul, verde y morado.Cogí un mechón de mi rizado pelo y empecé a jugar con él, de repente, me vino a la cabeza el recuerdo de una noche, hace ya un par de años. Samara estaba detrás de mí,  haciéndome una trenza(Creo) y estábamos hablando de mi última misión:
-Cuéntame ¿Qué tal la fiesta?¿Cómo era tu vestido?¿A quién tenías que asesinar?¿Por qué? Y lo más importante:¿Había algún bombón en la sala? ¡Deja de moverte, se te está estropeando la trenza! -Yo me moría de la risa, no podía parar, hacerme tantas preguntas y sin espacio para respirar entre medias era típico de ella.
-Primero:Bien, mucho lujo, había cientos de camareros de un lado a otro,... vamos, que el anfitrión no reparo en gastos,segundo:Lo escogí yo, así que ya to lo puedes imaginar:Verde y muy sencillo,a un magnate del petróleo,su hija quería hacerse con la herencia lo más rápido posible(Tenía unas deudas de la hostia) y, sí, ¡Eso estaba plagado de chicos en representación de sus padres!.
-Me encanta tu pelo...
-¿Y eso a que viene?
-A nada, pero es que me encanta.-Pasamos un rato en silencio.Después ella me preguntó:
-Samarkhanda, ¿Si te dijera que nos fuéramos, lo harías?-Se puso seria de repente, cosa que no pasaba muy a menudo y pensé que hablaba en serio, pero no me entraba en la cabeza que lo dijera realmente en serio.
-Yo...-La miré, estaba esperando mi respuesta-No lo sé, por un lado no sé que haría sin ti  eres mi mejor amiga y por el otro, este es nuestro ''hogar''...no lo sé, Samara.-Vi decepción en sus ojos, algo que jamás había visto en ellos y me asusté, pero en menos de un parpadeo, volvió a ser la chica que yo conocía.Mi amiga.
-No hace falta que te pongas así-Se rió y yo me reí, pero noté que estaba un poco resentida.No volvimos a tocar el tema.

Capítulo VII

Recoge una pluma negra del suelo, es suave y esponjosa.En cuanto la mira se convierte en fuego.La pluma se consume en las llamas.Pero él no la mira.Su mirada se posa en la figura que se aleja.<<Tenía que pasar, tarde o temprano  tenia que pasar>>piensa.Suspira.Pone rumbo al Bestiario.No titubea.Gira en lo que parece un enorme laberinto de jaulas, sabe adonde va .De repente, se para.Chasquea los dedos y aparece una llave plateada suspendida  a la altura de su cara.La agarra y abre la jaula.En un rincón en penumbra, se encontraba la bestia.Parecía que dormía, pero él sabía que fingía.Creo una ilusión de si mismo para que reaccionara.La ilusión se acercó y le tocó el hombro.La bestia intentó atraparla, pero la ilusión se desvaneció.
-Bien-dijo él-ahora que me presta atención, te diré que es momento de salir a cazar, querida.
La bestia intentaba saltar sobre él, pero las cadenas que la anclaban a la pared se lo impedían.
-Oh-añadió con un tono tan meloso como la miel- no te pongas así, seguro que tu amiga estará muy contenta de que os volváis a ver, después de lo mal que se lo has echo pasar.
La bestia gruñía y babeaba, emitía sonidos que en otro tiempo deberían haber sido palabras .
-Hummm...¡Es cierto, ya no puedes hablar!.
Chasqueó los dedos y unas cuanta chispitas blancas salieron de sus dedos.
-Samarrrrr-La bestia intentaba emitir el nombre de su presa con una voz cavernosa, producto de no haber hablado en mucho tiempo-Samarrrrrrrrrkkkhaandaaa
-Sí querida, tu amiga Samarkhanda ha sido muy mala y debes traerla de vuelta a casa.
-Samarkhanda...traerrrr aa cassssa.
El hombre ya se estaba impacientando a causa de el lento aprendizaje de la criatura.
Unos pasos inseguros se acercaron por el pasillo.
-Se-señor Alikoc...Le esperan en la sala de reuniones.
Alikoc se giró, le dirigió a el muchacho que había interrumpido una mirada cargada de odio.
-Diles que voy ahora.
 Antes de irse,se volvió a la criatura.
-luego hablamos Samara

Capítulo VI

Es de noche, pero no hace frío.Era verano.''La pesadilla de una noche de verano''pensé.Decidí dejar de pensar en ello y concentrarme en lo más importante de momento:Escapar.Cerré los ojos y me sumergí en el mundo de las energías, no había nadie escondido, en las habitaciones de al lado también, si hubiera estado trabajando me habría dado cuenta de que algo iba mal, pero me preocupaba más salir de allí sin ser vista y solo había un modo de hacerlo:Volando.Recuperé mi altura normal y me lancé al vacío, mientras caía me imagine a mí misma pero con un par de alas negras y plumosas (En el fondo me gusta cuidar los pequeños detalles.).Cuando estaba a un par de palmos de estrellarme, batí mis alas y me impulsé hacia arriba y puse dirección este.